La localidad que da nombre al municipio exige a la Junta que envíen un segundo médico a su consultorio, para evitar que su médica “de toda la vida” abandone su actual destino. La doctora Dolores Ruiz, Lola, como la conocen en el municipio, atiende a cerca de 1800 pacientes, cuando la norma establecida para una localidad del tamaño de Villaquilambre marca 1.300 cartillas y un exceso máximo del 20%.
Los vecinos se han reunido para conocer la situación y decidir cuáles son los pasos a seguir para evitar que su facultativa abandone el pueblo.
El concejal de sanidad Miguel Ángel de Celis ha explicado a los asistentes que “el Ayuntamiento ha hecho sus deberes”, ya que la gerencia de salud se comprometió a enviar otro médico si se instalaba un ascensor en el consultorio, una obra que se llevó a cabo el año pasado. Pese a estas modificaciones y al aumento constante de cartillas, aún no hay otro médico. “La atención a los ciudadanos es insuficiente, la media de espera para una cita está en torno a 12 días”, precisó el concejal, “ya se han celebrado tres reuniones con la gerencia y se volverán a solicitar para intentar dialogar con los responsables del Sacyl, incluso se ha solicitado en varias ocasiones una reunión con el consejero para tratar este y otros temas de interés, y solo hemos recibido la callada por respuesta” apuntó de Celis, a quién acompañaba el primer teniente de alcalde del municipio, Vicente Álvarez, que aseguró que “lo que persiguen es eliminar los consultorios de los pueblos y no lo vamos a permitir”
La presidenta de la Junta Vecinal de Villaquilambre, Francisca García, ha explicado que la facultativa de atención primaria “no se quiere ir, pero la sobrecarga de trabajo está haciendo que se lo piense, si no nos hacen caso iremos aumentando las movilizaciones”.
Los vecinos de la localidad han iniciado ya una campaña de recogida de firmas